Día tras día, al despuntar el sol, los panaderos y pasteleros de El Fornet observan un ritual que se repite desde 1927: amasar, fermentar y hornear siguiendo los principios que les legó Rossend Milà Tutusaus. Masas madre de más de 10 años creadas a partir de trigo, cebada o frutas. Y largas fermentaciones de hasta 24 horas.
Así es El Fornet, nuestro cliente más gustoso.